Evista

¿Qué es Evista (Raloxifeno) y cómo funciona?

Evista es un medicamento que se utiliza para prevenir y tratar el adelgazamiento de los huesos (osteoporosis) sólo en mujeres posmenopáusicas. Evista detiene la pérdida de masa ósea que puede desarrollarse en las mujeres posmenopáusicas y reduce el riesgo de cáncer de mama invasivo al bloquear los estrógenos en los tejidos mamarios y uterinos. También se utiliza para reducir el riesgo de cáncer de mama invasivo en mujeres posmenopáusicas que tienen osteoporosis o están en riesgo de cáncer de mama invasivo.

Posología y modo de empleo

Tómelo por vía oral con o sin alimentos/leche una vez al día.
La dosis habitual para adultos es de 60 mg al día. Para obtener los mejores resultados, utilice este medicamento junto con calcio y/o vitamina D.
Nota: Estas instrucciones se proporcionan aquí sólo como referencia. Debe consultar a su médico antes de utilizarlo. Esto le ayudará a obtener los mejores resultados.

Informe a su médico si tiene algún efecto secundario que le moleste o no desaparezca.

Estos no son todos los posibles efectos secundarios de Evista. Para más información, consulte a su médico o farmacéutico.

¿Cuáles son algunos de los beneficios de Evista?

Evista es una terapia hormonal sustitutiva (THS) que tiene los mismos beneficios hormonales del estrógeno sin los problemas de salud asociados. Es una píldora maravillosa, diseñada para trabajar en armonía con tu cuerpo y ayudarte a vivir la vida al máximo.

Los estrógenos protegen contra la pérdida de masa ósea en las mujeres jóvenes. Sin embargo, la terapia de sustitución de estrógenos después de la menopausia aumenta el riesgo de cáncer de mama y de ovarios. Ahí es donde entra en juego Evista. Modulador selectivo de los receptores de estrógenos (SERM) es el nombre del fármaco. Se utiliza para el tratamiento o la profilaxis de la osteoporosis.

Además de su efecto protector de los huesos, muchos expertos en cardiología creían que los estrógenos también protegían el corazón. El razonamiento era que las mujeres no suelen sufrir ataques cardíacos hasta que pasan la menopausia, cuando dejan de producir estrógenos.