Methotrexate

¿Qué es el metotrexato y cómo funciona?

El metotrexato es un grupo de medicamentos que incluye antimetabolitos, antipsoriásicos, antirreumáticos, otros inmunosupresores y analgésicos para la artritis reumatoide. No sólo reduce el dolor y la inflamación de los huesos de las personas con artritis reumatoide, sino que también disminuye el daño interno de los huesos por la enfermedad, reduciendo la posibilidad de que queden discapacitados por su condición.
El metotrexato actúa inhibiendo el crecimiento de ciertos tipos de células, incluidas las cancerosas, y reduciendo la inflamación. Se cree que actúa en parte inhibiendo la producción de ácido fólico, necesario para la división celular. El metotrexato también disminuye la actividad de las células inmunitarias, lo que puede ser útil en el tratamiento de las enfermedades autoinmunes.

Indicaciones y contraindicaciones

El metotrexato se utiliza para tratar muchas enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide, la artritis psoriásica, la vasculitis y el lupus. También a dosis mucho más altas, se utiliza para tratar el cáncer y las enfermedades autoinmunes:

• ciertos tipos de linfomas,
• leucemia,
• cáncer de vejiga,
• tumor cerebral,
• cáncer de mama,
• coriocarcinoma,
• síndrome de Cogan,
• cáncer colorrectal,
• dermatomiositis,
• eczema, etc.

El metotrexato debe utilizarse con precaución en personas con enfermedades hepáticas o renales, VIH/SIDA o antecedentes de abuso de alcohol. Tampoco debe utilizarse en pacientes que estén planeando quedarse embarazadas, ya que puede causar defectos de nacimiento en los recién nacidos. Si quiere quedarse embarazada, debe dejar de tomar metotrexato tres meses antes. Las pacientes que toman metotrexato tampoco deben amamantar a sus bebés.

¿Cómo se utiliza el metotrexato?

El metotrexato está disponible en forma oral, inyectable e intramuscular.
El metotrexato en forma de píldora de 2,5 miligramos se toma una vez a la semana, tanto si su médico le pide que lo tome en forma de píldora, de inyección o de líquido. Debe decidir el día de la semana en que quiere tomar el metotrexato y repetirlo el mismo día cada semana. En caso de que se olvide de tomar una dosis, sólo tiene que tomar la siguiente dosis como lo haría normalmente. A menudo, los médicos dividen la dosis tomando la mitad por la mañana y la otra mitad por la noche, si se trata de la forma de píldora, para obtener un mejor efecto. El metotrexato suele tomarse con una píldora de ácido fólico. Esta píldora se toma todos los días de la semana, incluido el día en que se toma el metotrexato.

Efectos secundarios

El metotrexato puede reducir la capacidad de su sistema inmunitario para combatir los gérmenes. Si tiene signos como heces blandas, una nueva tos, un nuevo dolor de garganta o ardor al ir al baño, informe a su médico de inmediato. Aproximadamente entre el uno y el tres por ciento de los pacientes presentan llagas en la boca, pérdida de cabello y recuentos sanguíneos anormales. La píldora de ácido fólico que se toma con el metotrexato disminuye mucho las posibilidades de tener llagas en la boca y pérdida de cabello. Mientras tomas este medicamento, debes recordar que todos los efectos secundarios no te hacen enfermar, y por eso hay que hacer análisis de sangre cada ocho o doce semanas para asegurarse de que estás bien. El metotrexato puede dañar el hígado, pero esto ocurre en personas que corren el riesgo de contraer una enfermedad hepática por otros medicamentos que están tomando, o por beber mucho alcohol. Una tos que no desaparece, o una dificultad para respirar que sigue empeorando, rara vez pueden ser consecuencia de que el metotrexato dañe tus pulmones con neumonitis por metotrexato.